jueves, 25 de marzo de 2010

Mirame


En muchas ocasiones no me comprendo, no entiendo todos estos sentimientos que se amontonan en mi pecho, ni puedo llegar a entender porque mi mente y mi cuerpo me pide ciertas cosas.
A veces el tiempo se detiene y un dia todo vuelve a ser como fue, aunque hayan pasado meses y la vida haya dado un giro muy grande.
He comprendido que solo tengo una vida y que si no la vivo yo no la vivira nadie por mi, que si no lucho yo nadie luchara por mi.
De mi depende disfrutarla, equivocarme, caerme y volverme a levantar.
Aunque no lo comprenda todo y sepa que quizas me equivoque al menos lo intentare... por que todavia ha dia de hoy sigo queriendo conservar lo importante.

jueves, 18 de marzo de 2010

Te extraño...





Tengo ganas de ti, como el alcohólico que por mucho que beba nunca se sacia y siempre quiere más y al final esa adicción le consume.

Al ver una foto tuya mi corazón se ha estremecido y mis sentidos se han invadido de tu olor, de tu calor, de tu cariño… ¿Cómo es posible que todavía conserve todo aquello?

A veces me pregunto como se puede querer tanto a una persona que no te corresponde y no hablo de amor platónico, el querer se creo de los momentos juntos pero tu ya no estas y esa realidad a veces me destroza el alma sin piedad.

Siempre espere esa señal, ese cambio, pero no llego y ahora solo me queda el seguir adelante, el aprender a vivir sin tus besos sin tus miradas… es curioso como una simple mirada puede remover cielo y tierra en una persona, ¿Cómo te puedo querer tanto? A veces me lo pregunto y no se describir con certeza este sentimiento, solo se que fuiste el motivo de que cada día yo me levantara, de saber que escucharía tu voz, de poder oír de tus labios que me querías y sentirme la persona mas especial del mundo.
Me provocas tranquilidad, a tu lado me siento bien, se que me aceptas como soy y que me querías por como era…

He pensado lo que seria sentir de nuevo un abrazo tuyo cargado de cariño y las lagrimas se han adueñado de mis ojos, debe ser un regalo poder sentir el contacto de tu cuerpo, tu suavidad, hundir mi nariz en tu cuello, tus brazos estrechándome, sujetándome para que no estalle de felicidad.

Recuerdo el último beso, como me aferre a ti esperando un milagro, creo que aunque suene fatal incluso suplicando en mi cabeza que te quedaras a mi lado, pero tu tomaste mi rostro entre tus manos me besaste y te fuiste, a paso ligero sin volver la vista atrás, a veces me he preguntado si no te giraste para no volver como antaño hiciste o que simplemente querías alejarte de mi.

No se si intento olvidarte, simplemente no se si quiero, eres de lo mejor que ha pasado por mi vida, eres mi motivo, eres la persona que sin saberlo me abrió los ojos a muchas cosas, si no fuera por ti yo todavía no sabría…

Tengo miedo de encontrar en tu mirada indiferencia, de saber que ya no me deseas, de comprender que solo yo te quiero así, pero quien soy yo para pedirte nada, los sentimientos no se exigen solo surgen.

Algún día estos sentimientos se perderán en el olvido, te mirare y me daré cuenta de que ya no siento lo mismo, o quizás comprenda que no estamos hechos el uno para el otro pero hubo tantas pequeñas cosas que me indicaron que había algo sumamente especial… existía una complicidad y aunque nos conociésemos de poco tiempo sabíamos mucho el uno del otro.

Dos palabras retumban en mi mente, dos palabras que dichas para ti tienen un significado y una importancia alarmante… te quiero.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Las rosas tienen espinas...


No existe la perfeccion, es imposible alcanzarla y tampoco seriamos mas felices si la rozasemos con la punta de nuestros dedos, pues, a fin de cuentas si todo fuera perfecto perderia la magia de lo impredecible.
Valoramos la felicidad, porque conocemos la tristeza...
Conocio su propia "perfeccion" donde nunca penso que la encontraria, fue en un ser sin espiritu de lucha, que se conformo con lo que tenia sin arriesgar.
Al menos le quedo el recuerdo de lo que fue al principio, de como luchaba por 10 minutos a su lado, de como la miraba, de como la besaba.
Supo que no le abria importado morir en ese instante que ahora comenzaba ha hacerse borroso, aquel momento en que sus cuerpos se tocaban, ese instante en que alcanzo la maxima felicidad.
Ahora todo aquello solo era en ocasiones un triste recuerdo.
Se pregunto como pudo querer tanto a una persona que no la valoro, que la perdio y no hizo nada, se pregunto por que aquel sentimiento no se desprendia de sus entrañas y la seguia torturando tanto tiempo despues.
Le gustaria odiarlo pero no era posible, pues en oscasiones tenia el secreto deseo de volver a rozar sus labios, de volver a mirar aquellos ojos llenos de vida, esa mirada que el ya no poseia.
Y comprendio que aquella era su propia condena, que aunque el no la quisiera, ella sentia por los dos, y los recuerdos con el eran su preciado tesoro, y eso nadie podia robarselo.
Ella sufria por un amor perdido, pero al menos conservaba ese amor, el solo conservaba una mentira, es curioso las historias que se viven, las lagrimas que soltaras en las amargas noches y la sangre que sera derramada por el dolor.
Recuerda que las rosas siempre tienen espinas...

domingo, 14 de marzo de 2010

Hogueras


La cuerda que ataba sus manos cortandole la circulacion era un cruel balsamo comparado con el sufrimiento de su cuerpo. Notaba la garganta seca por el humo de las mujeres que habian sido ejecutadas, ligeramente rasposa de las lagrimas que ya no derramaria.
Quiso gritar pero su voz solo era un murmullo vacio en medio de aquel caos salvaje.
Las torturas que su cuerpo habia recibido la envolvian en un insoportable malestar, las heridas abiertas y lacerantes, abrasaban de forma despiadada.
No habia palabras para describir algo asi...
El dolor de su alrededor y el suyo propio eran insensibles a la debilidad humana.
Busco con su mirada nublada por el sufrimiento a una persona que deseaba contemplar antes de irse de alli.
Habian gritado que era una bruja, la habian condenado por ello, fue torturada en un intento segun ellos de limpiar su sucia alma, no importaba si confesabas que lo eras o no, tarde o temprano te matarian igualmente, asi pues ella se habia mantenido todo lo firme que una persona ante semejante daño puede mantenerse, no dejo que sus jadeos de dolor les causara placer al imponer "justicia".
Si era una pecadora y debia pagar por ello, bien sabia que solo podian juzgarla por haber amado a un hombre, no por ser aliada del Diablo.
Su rostro empañado de dolor encontro al ser por el que estaba ofreciendo su vida, un hombre casado, de familia noble y una mujer cruel y despiadada que la habia acusado de brujeria cuando en realidad estaba amandose con su esposo.
Podia ser bruja, no tal vez de la forma que ellos creian o pensaban pero ante todo era una mujer, con sentimientos, una persona que habia amado y estaba siendo castigada por ello.
No necesito una conjuro para poder besarle, solo hizo falta una mirada y la complicidad se creo sin ser buscada.
Cuando las miradas de ambos se encontraron solo vio en sus ojos culpabilidad y dolor, en parte ambos sabian que no habia nada que hacer, pero ella deseo que el luchase por ese sentimiento que se quemaria en las llamas en unos minutos.
Y justo cuando comprendio que llegaba el final, que la hora se acercaba y no viviria nada mas, deseo maldecir a aquellos seres vacios, llenos de maldad, alejados de la posibilidad de alcanzar el amor.
Supo que ya no volveria a dormir contemplando las estrellas bajo aquel cielo magico, ni que disfrutaria de un amanecer frente al mar, pero tambien supo que aquel hombre siempre conservaria esa sensacion de culpabilidad, ella no viviria una noche mas, el nunca se podria permitir ya una noche tranquila, pues los sueños tarde o temprano en medio de la noche le traicionarian.
Se acercaron para encender la hoguera que permanecia bajo sus heridos pies, le contemplo fijamente, solo en medio de una multitud, solo por siempre. Y recordo la sensacion de sentir sus labios y sus manos por su piel, comprendiendo que auque el fuego quemase su cuerpo, su alma era completamente libre y lo habia demostrado amando, queriendole como nadie, aunque estuviese a punto de recibir aquel final.
Sus miradas se encontraron y se miraron como aquella primera vez, cuando el amor se comenzo a crear en secreto, la madera comenzo a arder y antes de perder la cordura, la mujer susurro el nombre de el entre sus heridos labios y una lagrima cargada de emocion resbalo por su mejilla...
Mantuvo sus ojos fijos en el tanto como le fue posible y le vio caer arrodillado al suelo lleno de dolor y cobardia, con el alma destrozada, tan dolorida como la piel quemada de ella.
Minutos despues todo se volvio negro y solo quedo lugar para la muerte, la desolacion, culpabilidad y tristeza.

sábado, 6 de marzo de 2010

¿Segundas oportunidades?


Sostenia un vaso en sus manos, el agua fresca enfriaba el cristal que ella con su mano calida sujetaba con firmeza.
Se sentia cansada despues de comprar y se tomo unos minutos de descanso para refrescarse mientras que miraba por la ventana de la cocina por la que entraba una luz brillante.
Era una mañana como otra cualquiera, no muy diferente a la anterior, todas ellas envueltas por la gracia de la primavera.
No hubo ninguna señal, ningun signo que indicase que ese dia poseeria algo muy diferente al resto.
Mientras contemplaba por la ventana la gente que pasaba por la calle, la luz que iluminaba los edificios, los pajaros en el cielo, se llevo el vaso lentamente a los labios y dio un pequeño trago que saboreo con delicadeza. Justo en ese momento su telefono movil sono, vibro con rabia sobre la mesa de la cocina.
Se giro para acercarse a cogerlo, lo levanto con la mano libre y miro quien era. Sus ojos se abrieron mucho y parpadeo sin creer lo que ponia en aquella pantalla, estuvo a punto de soltaro en la mesa y olvidarlo todo, porque sin saber porque en aquel momento solo queria desaparecer.
Respiro profundamente y decidio cogerlo, penso que podia y que no le supondria ningun problema. Se lo llevo ala oreja y contesto con un "si" la voz le temblaba ligeramente y el pulso estaba descontrolado.
-Hola Luna- dijo con aquella voz que ella recordaba a la perfeccion.
Quiso suspirar, o deshacer el nudo que comenzaba a formarse en su garganta.
El vaso resbalo de su mano y choco contra el suelo, con un sonoro golpe que la hizo volver a la realidad, recordandole que llevaba sin hablar con el años, que tenia una vida muy diferente a entonces y que ya no estaba enganchada a esa persona.
-Hola- dijo suavemente.
El le pregunto como estaba y comenzo sin esperarlo una conversacion sencilla con las tipicas preguntas que se suele hacer la gente que mantiene contacto normalmente.
Tras unos minutos de conversacion, el se quedo callado y se escucho como suspiraba.
-Luna..- dijo lentamente dudando si continuar o no.
La mujer se sento en la silla, y miro el vaso estrellado en el suelo, el liquido derramado y penso en todo lo que tenia que hacer, todo tan lejano, tan poco importante que parecia solo importar esa llamada, esa voz.
-Dime por que me has llamado- le dijo poniendole firmeza a sus palabras.
-Por que te echo de menos- le dijo el con ese tono seductor que le salia sin querer cuando se sinceraba y le costaba expresar lo que sentia. - Y se que es muy tarde para decirlo pero senti que tenia que decirtelo porque necesito verte.
Al escuchar aquellas palabras Luna sintio que el corazon le daba un vuelco, que espero mucho tiempo escuchar aquello y ahora llegaba en el momento mas inoportuno.
Una lagrima resbalo por su mejilla, la seco intentando borrar aquel sentimiento, pero vinieron mas y fue imposible parar aquel torrente de emociones.
-Tengo que colgar. dijo susurrando - No se si es bueno que nos veamos.
-No se si sera bueno, pero se que lo deseo, que llevo echandote de menos mucho tiempo y no he tenido valor para decirlo y creo que quizas aunque solo sea un poco tu tambien tienes ganas de verme.
-Lo pensare- contesto conteniendo el llanto. - Adios- dijo sabiendo lo que significaba para ellos decir aquella palabra. Llevaba ese significado de despedida, pero que entre ellos podia significar un hasta pronto.
Cuando colgo solto el telefono sin cuidado sobre la mesa y entonces se permitio llorar con libertad. Desconocia aquella sensacion, llevaba sin sentir aquel sentimiento por el demasiado tiempo, pero con esa llamada era como si se hubiese despertado. Le provoco miedo...
La puerta sono y supo que el habia llegado, que seguramente se pasaria por casa a tomar algo y volver al trabajo. Corrio y cogio un papel para recoger los trozos de cristal y se agacho dejando que su pelo le tapase ligeramente la cara. El entro en la cocina y le saludo con su voz tan agradable.
-Hola cariño!
Luna junto los cristales y le saludo sin mirarle, el se dio cuenta de los cristales rotos y se acerco para ayudarle.
-Vaya se te ha roto, ¿te has cortado nena?- dijo acercandose y mirandola preocupado, le observo las manos y despues la cara no habia ninguna herida pero noto las mejillas mojadas, ella evitaba mirarle y seguia juntando cristales.
-¿Estas bien Luna?- le acaricio el rostro girandoselo para que se mirasen.
-Estoy bien- contesto incorporandose. Se sintio una mujer muy estupida tenia a su lado una persona estupenda y sin embargo faltaba algo, pero no sabia que era.
Se acerco a la basura y tiro trozos de cristal, con cuidado de no cortarse. El la siguio y cuando le vio las manos libres a acerco a el y la abrazo. Al principio ella se mantuvo distante, estaba bloqueada por sus emociones, pero cuando el olor de su cuello le toco la nariz, la suavidad de su piel acaricio la suya y su reconfortante pecho la hizo sentir protegida se aferro a el con desesperacion.
Y entonces lo comprendio, solo en el instante en que ese abrazo la inundo por completo, justo cuando el aspiro su aroma y le beso la frente con cariño aun sabiendo que a ella no le gustaba. Supo que hay heridas que nunca terminan de sanar aunque esten cicatrizadas, que el dia mas inesperado puede volver a doler como si se hubiesen abierto.
Quien realmente la queria era quien la estrechaba en sus brazos y a quien ella queria era a quien abrazaba, no hacia falta palabras, el sabia que estaba triste pero nunca la presionaba sabia que si ella queria hablarlo lo diria y si no se le pasaria sin mas. Esa era la complicidad que les unia.
Se miraron a los ojos y ella acerco su boca a la suya para besarle, noto su sabor tan familiar que le provoco una sonrisa.
No sabia si devolveria aquella llamada, pero si sabia que esa persona seguia siendo importante en cierta manera, pero no estaba dispuesta a perder lo que tenia, lo que realmente queria por una historia que le habia causado dolor y todavia hoy podia causarle lagrimas.
La vida da muchas vueltas y los recuerdos puedes grabarse a fuego al igual que los sentimientos, pero los dias, los meses e incluso los años lo terminan cambiando todo demasiado, aunque otras veces solo lo congela en el tiempo.